¿Miedo al compromiso? Aida Mañero Ocarranza
Uno de los posibles motivos de consulta en la práctica terapéutica de la terapia de pareja es el miedo al compromiso que experimenta uno de los miembros de la misma. Este hecho de comprometerse es vivido por el sujeto temeroso como algo angustiante y que genera un malestar manifiesto; en el caso del otro miembro de la pareja, esta situación produce igualmente sufrimiento, puesto que no se ven cumplidos sus deseos y expectativas al respecto. Todo esto es probable que de lugar a un desgaste en la pareja la cual puede finalmente romperse ante tal situación, si no es tratado y abordado de forma adecuada mediante la ayuda de profesionales especializados en el tema.
Pero, ¿por qué surge ese miedo a comprometerse con una pareja?
Para cada sujeto y para cada pareja el término compromiso puede significar algo distinto, es decir, para algunas el compromiso puede ser casarse, para otras simplemente vivir juntos y para otras compromiso puede significar tener hijos. El miedo de un individuo ante cualquiera de estos hechos aparece cuando éste los interpreta más como una pérdida (de tiempo para uno mismo, de intimidad…) que como algo que pueda aportarle amor, bienestar, felicidad, compañía, satisfacción…
Así, ante una situación en la cual el sujeto interpreta que aparece el compromiso, se manifiestan sus dudas y miedo al respecto, dando lugar a una dificultad en la toma de decisiones en este sentido, puesto que el hecho de acceder a él supone para sí mismo la salida de su hasta ahora zona conocida de bienestar y seguridad.
¿Cómo actúan las personas con miedo al compromiso?
Los individuos con miedo al compromiso por lo general suelen ser sujetos inseguros, con dificultad para expresar las propias emociones y con una necesidad de control la cual les dificulta salir de su zona de confort y estabilidad.
Así pues, estas personas buscan relaciones estables, que les aporten esa confianza y seguridad de la que ellas mismas carecen; sin embargo, una vez se adentran en dicha relación y ven que ésta comienza a ir más allá y a tornarse seria, empieza a aparecer el miedo y es el momento en el que surgen las dudas. Finalmente, dado que estos individuos presentan dificultades para manejar y expresar su miedo y malestar, es probable que propicien terminar con la relación con el fin de recuperar y retornar a esa zona conocida y de bienestar y, de este modo, acabar con el temor y descontrol que experimentan.
¿Tiene solución el miedo al compromiso?
En este caso, al igual que ocurre con el resto de miedos, la solución consiste en enfrentarse a ese temor que resulta perturbador e interfiere significativamente en el funcionamiento de la persona.
Mediante el trabajo conjunto del profesional con la pareja y con el individuo con temor al compromiso en cuestión, es posible obtener grandes avances y cambios notables, todos ellos encaminados a lograr el bienestar de ambos miembros de la pareja, la cual a partir de ese momento podrá ver cumplidas las metas y expectativas a las que aspire.