Hay personas que buscan a su príncipe azul y  sólo encuentran sapos que después de ser  besados siguen siendo sapos, muy a su pesar y a su esfuerzo en la búsqueda. El príncipe azul no existe, al igual que probablemente ella tampoco sea una princesa, es más es preferible que si en algún lugar existe realmente, lo mejor sería no encontrarlo. ¿Qué felicidad se puede encontrar en el hombre perfecto? Ninguna, pues probablemente le decepcionemos, no somos verdaderas princesas y tampoco es bueno querer serlo. Es mejor tener errores y fallos, poder equivocarnos, se vive más feliz. Por lo que es mejor buscar un hombre como yo con sus fallos,…